Las Panteras son otra vez olímpicas
Las Panteras se impusieron con parciales de 16-25, 25-21, 25-16 y 25-23 frente a las locales, que eran «a priori» las favoritas, y por segunda vez en su historia participarán de unos Juegos Olímpicos, después de haber estado en los anteriores de Río 2016.
El himno local «a capella», con 6.500 personas cantando, fue intimidante. Las colombianas salieron a jugar con toda la actitud, en defensa, en ataque, en bloqueo. Y obligaron a los errores argentinos: siete puntos entregados a Colombia por equivocaciones propias, contra apenas uno del rival.
Las Panteras no encontraban las variantes para hacer el punto del otro lado y las locales cerraron con gran diferencia el primer set a favor: 25-16, con la opuesta Dayana Segovia como principal arma de ataque.
En el inicio del segundo, la defensa colombiana continuó controlando a Lucía Fresco, y el técnico Hernán Ferraro dispuso el ingreso de Daniela Bulaich. La actual jugadora de San Lorenzo terminó siendo decisiva para que Las Panteras igualaran el partido. Se cargó los contraataques, descolocó a las locales y rápidamente se convirtió en la máxima anotadora albiceleste.
Victoria Mayer, la armadora zurda de 18 años que tienen Las Panteras y que está haciendo su primera experiencia en el exterior, en Flamengo de Brasil, sacó a relucir todo su potencial, eligió bien las salidas con sus jugadoras según los momentos de cada una y hasta se animó a sumar ella con ataques o toques de segunda.
La cordobesa Yamila Nizetich, una de las que juega en Italia y campeona de la Champions League en 2019 con Novara, aportó muchísimo en defensa, como la líbero Tatiana Rizzo. Bianca Farriol, la central que terminó la secundaria en 2019, dominó en la red. Elina Rodríguez (terminó como máxima anotadora con 19 puntos) y Bulaich (17) siguieron «prendidas fuego» en la ofensiva y Las Panteras ganaron el tercer parcial con comodidad.