Desde las estribaciones de El Alto a la parte sur de la ciudad donde viven las clases más acomodadas de La Paz, la ciudad parece una postal, una foto fija de la jornada electoral. El silencio lo invade todo. No hay transporte público, las cabinas del teleférico están inmóviles en medio de un paisaje donde casi nada se mueve. La gente camina con cierta pereza y solo se percibe mucha actividad en los centros de votación. El Tribunal Supremo que supervisa los comicios, ya informó en su “evaluación de media jornada electoral” que todo marcha bien. María Eugenia Choque, su presidenta le cuenta a la prensa algunos pormenores. Viste su traje de chola con el sombrero bombín de color beige y una manta que le cubre los hombros.