Fue un regalito en la agonía del partido
En el último partido de la fase de grupos de la Copa Libertadores, River igualó 2-2 en Núñez con Internacional de Porto Alegre. En la previa, ambos ya tenían el pasaje en el bolsillo a la próxima instancia, por delante de Palestino de Chile y de los peruanos Alianza Lima, que completan el Grupo A. Julián Alvarez abrió la cuenta para el equipo de Marcelo Gallardo, la visita lo dio vuelta con un doblete de Rafael Sóbis, el segundo de penal, y Lucas Pratto selló el empate. El equipo gaúcho terminó líder con 14 puntos, seguido por el campeón vigente con 10. Si Boca le gana mañana a Paranaense, liderará el Grupo G y podría haber Superclásico en los octavos de final.
En su regreso con público al Monumental tras cumplir la sanción impuesta por la Conmebol de dos cotejos a puertas cerradas por los graves incidentes en la final de la Libertadores del año pasado contra Boca, River –que ayer presentó varios suplentes– venía entonado tras vapulear por 6-0 a Aldosivi que le dio el pase a los cuartos de final de la Copa de la Superliga.
Recién cerca de la media hora de juego, una gran tapada de Armani ante el uruguayo López hizo las veces de despertador en el juego, dado que hasta entonces todo era demasiado parejo. La réplica no demoró y Lomba respondió en gran forma ante un disparo a quemarropa de Pratto, que tomó el rebote y cedió para el cabezazo de Alvarez que un defensor rechazó sobre la línea. Pero el chico de 19 años enseguida tendría revancha, aunque en offside, con una gran definición por arriba del arquero, tras un pase de Palacios. Fue el primer gol en una Libertadores de Alvarez, quien ya prepara valijas con Ferreira y Sosa para sumarse al Sub 20 que disputará el Mundial de Polonia.
Sin embargo, diez minutos más tarde, un zapatazo de Sóbis dejó estacado a Armani y ambos conjuntos se fueron al vestuario igualados en un gol.
Ya en el complemento, Lollo le hizo un penal infantil a Moledo que Sóbis cambió por gol. Pero sobre el final, en una acción desafortunada, el arquero Lomba devolvió gentilezas y Pratto sentenció el 2-2 definitivo.